Grandes investigadores y estudiosos, han establecido desde finales del siglo pasado, que el éxito de un niño o una niña en el aprendizaje de la lectura y la escritura lo determina, el contacto con la lengua escrita, antes de llegar al colegio.
Es lo que conocemos, en el aula de clase, como el conocimiento previo. (Snow y Burns 1998), sin él, los niñ@s presentarán dificultades para el desarrollo de las habilidades necesarias para leer y escribir.
Entonces....esto deja a nuestros hogares, como el principal espacio donde se establecen las bases para lograr formar seres humanos, que disfruten e interactúen con los textos que leen. Seres humanos que comprendan que la lectura y la escritura, transmiten mensajes...nuestros mensajes!
¿Qué hacer?
· Permitir que los niñ@s se acerquen a los libros a través de nosotros como padres. Los padres de familia que no leen, afectan negativamente la motivación en los niños para aprender a leer.
· Leer, sin importar la edad, conversar sobre lo leído y entablar juegos de preguntas y respuestas.
· Leer cada día. Los padres que leemos a nuestros niñ@s, permitimos que entren en contacto, a través de los libros y cuentos, a un mundo de emociones y fantasías, que más adelante les va a permitir comprender sus propios sueños y emociones.
· Como padres de familia debemos dar ejemplo y establecer rutinas de trabajo con nuestros hij@s, nada les motiva más que reforzar la lectura y escritura junto a papá o mamá.
· Recordemos que cada niñ@ tiene un ritmo de aprendizaje diferente y aquellos que presentan dificultades para leer y escribir, pueden superar los obstáculos, siempre y cuando cuenten con el apoyo de su núcleo familiar, el cual, conoce las fortalezas y debilidades, gustos y temores de cada un@.
· Y por último, pero no menos importante, conocer las diferentes etapas, por las que pasan nuestros hij@s, cuando aprenden a leer y escribir, de esta forma podemos apoyar el proceso desde casa.
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